El teatro consiste principalmente en mostrar desde un escenario la ficción o sublimación de la realidad de la vida, en el que los actores interpretan personajes ante un público. El teatro produce una gran empatía donde sus asistentes se identifican con la magia del actor. Es en ese espacio creado para convencer que debes sufrir pero también gozar y reír.
Como vas a escribir sobre un monólogo, debes considerar que toda la responsabilidad está centrada en una sola persona, es decir un personaje construido por un dramaturgo. Veamos a continuación algunas indicaciones de como escribir un monólogo teatral.
Indicaciones para la representación
Tu cuaderno de apuntes amigo inseparable
Este se convertirá en tu amigo inseparable, nunca debes salir sin él, ni dejar en casa ni mucho menos dejarlo olvidado en cualquier parte. El cuaderno es una herramienta fundamental porque aquí registrarás todo tipo de experiencias que observes al tu alrededor y que por algún motivo te causen alguna impresión.
Describe allí de qué se habló, quiénes actuaron, qué dijeron y de lo sucedido qué fue lo que atrapó tu atención.
Cómo hablan los personajes
Como se trata de un monólogo establecer el carácter es más sencillo porque te centras en un solo ser. Su forma de hablar dependerá de su clase social como también de los estados de ánimo en que se encuentre. Lo importante es tener la consideración de que el lenguaje teatral fluctúa en el tiempo presente.
Cualquier despliegue de descripción o de narración del pasado o un viraje del personaje hacia el futuro, hará que la acción dramática se ponga lenta y es ahí cuando el espectáculo se pone aburrido.
Aquí la palabra es acción inmediata y por lo general cargada de una emoción constante. Por ejemplo el personaje expresa su amor, su sufrimiento o la felicidad porque la siente en ese momento ahí en cuerpo presente.
Es recomendable que el personaje se exprese de manera sencilla y acorde con su realidad. Que el uso de las palabras sea de fácil comprensión. Aunque la situación sea de enredos y confusa lo que se dice en el escenario deben entenderlo con claridad todos los presentes.
El personaje
Los dramaturgos más expertos desenvuelven los personajes a partir de tres dimensiones. La dimensión social, la dimensión física y la dimensión psicológica. Las tres evolucionan como un todo mostrando del personaje su condición económica y lo que deriva de ello, si es pobre o rico, por ejemplo.
Igualmente como es su presencia física tanto la gestualidad como su manera de caminar y si tiene algún defecto físico resaltante. Su mundo emocional, anímico y sentimental también hay que considerarlo.
Elementos teatrales de apoyo
Para enriquecer lo que tú deseas trasmitir con el personaje se recomienda como una gran herramienta de apoyo, el uso de los elementos teatrales.
Además de la preparación del actor para la formación y conducción del personaje debes considerar entre otras cosas la dirección, la iluminación, el sonido, la musicalización, el vestuario, el maquillaje, la escenografía y la utilería. Y por supuesto algo muy importante y de nuestra incumbencia como lo es la creación del texto.
Indicaciones para elaborar el texto teatral
Cómo debe comenzar el monólogo
El personaje debe hacer primeramente su presentación personal y especificar cuál es el propósito por el que está en escena. Igualmente debe hacer sentir su agradecimiento a los presentes, aunque esto no es una condición estricta se recomienda para que haya otro dinamismo.
Seleccionar el tema
El tema es una frase a manera de síntesis que expresa todo de lo que va a tratar la obra. Para encontrarlo puedes asistirte de informaciones que estén en los periódicos, en la radio o bien en las conversaciones cotidianas de las personas.
Los lugares que concentran muchas personas se convierten en el escenario ideal porque por lo general tienden a ser centros de conflictos dramáticos. Presta mucha atención a los conflictos y sustrae de allí el tema que deseas desarrollar en tu obra.
Atento a los pequeños conflictos
Los conflictos se dan producto de pequeñas fuerzas antagónicas que se encuentran y hacen acción y reacción. Los personajes tienden a tener diferencias y van presentando pequeños choques en escena.
Estos no son expresiones aisladas, poco a poco van contribuyendo y anunciando el conflicto principal o central por el que se desarrolla el monólogo y está estrechamente relacionado con el tema seleccionado.
El clímax
Este es el punto culminante del monólogo. Es el espacio dramático que todo el mundo está esperando que se dé porque allí es donde se van a suceder las situaciones de máximo interés.
La mayor emoción se expresa en este momento y se espera que el personaje a partir de sus diferencias con otro o consigo mismo, ya no haga más resistencia y estalle mostrando sus rabias producto de su angustia existencial.
El desenlace
Aquí se presenta un momento de sosiego y de tranquilidad, una calma que se desea después de que el personaje está agotado de existir en ese espacio de tiempo cargado de tensión. Responde las preguntas en qué terminó el conflicto. A dónde condujo todo lo que el personaje sintió.
Por lo general se encuentra en un gran vacío que representa el final de la historia. Todo termina y se anuncia otro comienzo con un tema similar pero en manos de otro ser.
Despedida y agradecimiento al público
La despedida le corresponde al actor. Es el responsable de producir la empatía final con el espectador. Crear la expectativa de otro comienzo y solicitar la recomendación del monólogo por parte de los presente.
Es un juego gracioso para asegurar, de alguna manera, la asistencia a la próxima presentación del monólogo tan exitoso que acabas de escribir para este público tan maravilloso.
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